Artritis en personas mayores: Guía para manejar el dolor y mejorar la calidad de vida en la CDMX
La artritis es una condición que afecta a millones de personas mayores en todo el mundo, y en la Ciudad de México no es una excepción. Esta enfermedad, que se caracteriza por la inflamación de una o varias articulaciones, puede manifestarse de diversas maneras, desde un dolor leve hasta una rigidez severa que limita significativamente la movilidad y la independencia. Comprender cómo se presenta la artritis en los adultos mayores y, más importante aún, cómo manejarla de manera efectiva, es fundamental para garantizarles una vida plena y digna. No se trata solo de aliviar el dolor, sino de adoptar un enfoque integral que mejore su bienestar general.
El diagnóstico temprano es un pilar fundamental en el manejo de la artritis. Aunque no existe una cura definitiva para la mayoría de los tipos de artritis, un diagnóstico oportuno permite iniciar tratamientos que pueden ralentizar su progresión, reducir el dolor y preservar la función articular. Los síntomas iniciales suelen ser sutiles: un dolor persistente en una articulación, rigidez matutina que dura más de unos minutos, hinchazón o sensibilidad al tacto. Es crucial prestar atención a estas señales y consultar a un médico, preferiblemente un reumatólogo, para una evaluación adecuada. En la CDMX, el acceso a especialistas es amplio, lo que facilita obtener una opinión profesional que guíe el camino a seguir.
Una vez que se tiene un diagnóstico, el tratamiento de la artritis en personas mayores generalmente implica una combinación de estrategias. Los medicamentos son a menudo el primer frente de acción. Estos pueden incluir analgésicos para controlar el dolor, antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) para reducir la inflamación, e incluso fármacos más específicos como los modificadores de la enfermedad (FARME) o biológicos, dependiendo del tipo y la severidad de la artritis. Es vital que la administración de estos medicamentos sea estrictamente supervisada por un médico, dado que las personas mayores pueden ser más sensibles a los efectos secundarios. La polifarmacia, es decir, el uso de múltiples medicamentos, es común en esta población, por lo que una coordinación cuidadosa es indispensable para evitar interacciones adversas.
Más allá de la farmacología, la terapia física juega un papel irremplazable en el manejo de la artritis. Un fisioterapeuta puede diseñar un programa de ejercicios personalizado que ayude a mantener la flexibilidad, fortalecer los músculos alrededor de las articulaciones, y mejorar el equilibrio y la coordinación, lo que reduce el riesgo de caídas. Estos ejercicios no tienen que ser extenuantes; actividades de bajo impacto como caminar, nadar o hacer yoga adaptado son excelentes opciones. En la Ciudad de México, existen diversas clínicas y profesionales que ofrecen estos servicios, y muchos de ellos incluso pueden realizarlos a domicilio, lo cual es una gran ventaja para las personas mayores con movilidad limitada.
La alimentación también ejerce una influencia significativa en la artritis. Adoptar una dieta antiinflamatoria, rica en frutas, verduras, granos integrales, pescado azul (rico en Omega-3) y aceite de oliva, puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. Es recomendable limitar el consumo de alimentos procesados, azúcares refinados y grasas saturadas, que pueden exacerbar los procesos inflamatorios. Mantener un peso saludable es otro factor crítico, ya que el exceso de peso ejerce una presión adicional sobre las articulaciones, especialmente en las rodillas y las caderas, agravando el dolor y el deterioro. Un nutriólogo puede ofrecer planes alimenticios personalizados y adaptados a las necesidades específicas de cada adulto mayor.
El bienestar emocional y social no debe pasarse por alto. Vivir con dolor crónico puede ser agotador y llevar a sentimientos de frustración, aislamiento o incluso depresión. Fomentar la participación en actividades sociales, mantener la mente activa a través de hobbies o juegos, y proporcionar un entorno de apoyo emocional son tan importantes como el tratamiento físico. La conexión con otros, ya sea a través de grupos de apoyo o simplemente con familiares y amigos, contribuye enormemente a la calidad de vida.
En este camino, el apoyo en casa puede ser la clave para que las personas mayores con artritis mantengan su independencia y confort. Tareas cotidianas como vestirse, preparar alimentos, moverse por la casa o incluso recordar la medicación, pueden volverse desafiantes. Es aquí donde un servicio de cuidado de adultos mayores en CDMX puede marcar una diferencia sustancial. Un cuidador profesional no solo asiste en estas actividades diarias, sino que también puede ayudar con los ejercicios recomendados por el fisioterapeuta, monitorear la ingesta de medicamentos y ofrecer compañía, aliviando la carga sobre los familiares y asegurando que el adulto mayor reciba la atención constante que necesita.
En Cuidaris, entendemos profundamente los retos que implica vivir con artritis en la edad avanzada. Nuestros cuidadores están capacitados para ofrecer un apoyo integral y personalizado, asegurando que tus seres queridos reciban la atención especializada que necesitan para manejar su condición. Desde asistencia con la movilidad y el higiene personal, hasta el recordatorio de medicinas y la preparación de comidas saludables, nuestro objetivo es mejorar la calidad de vida de los adultos mayores en la Ciudad de México, permitiéndoles vivir con dignidad y el mayor bienestar posible en su propio hogar.
Si un familiar mayor en la CDMX está lidiando con la artritis y sientes que necesita un apoyo profesional y compasivo en casa, no dudes en contactarnos. En Cuidaris, estamos listos para ayudarte a encontrar la solución de cuidado que mejor se adapte a sus necesidades y a las tuyas. Visita cuidaris.com.mx o llámanos hoy mismo para conocer cómo podemos brindar esa mano amiga que tu ser querido necesita para manejar la artritis y disfrutar de una vida más cómoda y feliz.